Delirios y alucinaciones en los mayores
Suceden en personas mayores
A menudo los mayores pueden sufrir delirios o alucinaciones que han de ser tratados porque si no repercutirán en su calidad de vida.
Los delirios y alucinaciones que sufre un mayor suelen venir o por una enfermedad ya detectada o como comienzo de otra como la demencia. Es por esto último por lo que se ha de detectar cuanto antes para ponerle solución.
Una persona tiene un delirio cuando en su mente surgen ideas que no se corresponden con la realidad. La persona que tiene el delirio actúa como si las ideas fueran reales, pudiendo desarrollar conductas agresivas o defensivas.
Entre los síntomas de delirios en mayores:
- Cambios en la conducta.
- Pasar de lucidez a paranoia bruscamente.
- Problemas en el sueño.
- Cambios drásticos emocionales.
- Sufrir pérdidas de memoria y de capacidad de atención.
- No tener consciencia de la realidad.
- Falta de control muscular.
¿Es el delirio en mayores una enfermedad?
Los delirios no son una enfermedad si no un síntoma de una enfermedad. Pueden surgir junto a las alucinaciones, aunque no son lo mismo.
Una alucinación es una creencia inventada que surge de forma única en la mente de la persona que la padece. Las alucinaciones pueden ser auditivas, táctiles o visuales. Son fáciles de detectar y que solo las ve, oye o percibe la persona que las padece.
¿Es frecuente los delirios en las personas mayores?
Las personas mayores sufren delirios normalmente cuando sufren un problema mental o psicológico. Tipos demencia, esquizofrenia, alzheimer, depresión, trastorno paranoide o maníaco. También pueden ser debidos al consumo de drogas, alcohol o ingesta de determinados medicamentos. El médico que los debe tratar son los neurólogos. Las personas que han sufridos delirios pueden ser propensas a padecer una enfermedad neurodegenerativa con el tiempo.
Junto a los delirios pueden aparecer las alucinaciones. Surgen por la confusión mental que tiene el mayor en ese momento. O por un síntoma psicótico derivado de una enfermedad mental. Si con tratamiento no farmacológico el mayor no mejora ha de ser tratado con fármacos.
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A mi madre la interné hace cuatro días en un geriátrico, tiene edema pulmonar, delgadez extrema, no tolera la comida, y de última delira un poco, en un momento de lucidez y sin encontrar otra opción ya que no la puedo seguir cargando porque no tiene movilidad propia, decidimos que aceptaba ir a un geriátrico, ahora que está allí me pide irse, que le prepare su ropa que quiere volver a casa, que ahí está igual, que no hay diferencia en estár allí que su casa, pero no es tan así, yo ya no puedo levantarla, ni bañarla en el baño, con el agravante de su incipiente desvarío no constante, qué se hace?, debo esperar que se adapte o volver a traerla a mi casa?, hemos pagado todo el mes, y a mí me tranquiliza saber que está cuidada por personal experiementado y médicamente. Soy de Argentina.
Hola Miriam, lo mejor es ayudar a su madre a adaptarse a la residencia. Con visitas e interés, haciendo saber que la salud de todos, la de su madre y la suya propia, mejoran gracias a los cuidados profesionales y a la atención médica. Es un proceso complicado pero poco a poco puede lograrse. Gracias por el comentario. Un saludo